Los glicerofosfolípidos se han englobado clásicamente dentro del grupo genérico de los fosfolípidos.
La estructura de los glicerofosfolípidos deriva del L-glicerol-3-P que se esterifica en las posiciones sn-1 y sn-2 con dos ácidos grasos (dando, así, ácido fosfatídico, intermediario en la biosíntesis de glicerofosfolípidos) y en el grupo fosforilo con alcoholes de bajo peso molecular que definen el tipo de glicerofosfolípido: con colina, fosfatidilcolina (lecitina); con etanolamina, fosfatidiletanolamina (cefalina); con serina, fosfatidilserina; con inositol, fosfatidilinositol; con glicerol, fosfatidilglicerol; y con fosfatidilglicerol, cardiolipina.
colina |
etanolamina |
serina |
mio-inositol |
glicerol |
En el carbono 1 suelen tener un ácido graso saturado y uno insaturado en el carbono 2 (ver datos), pero la composición puede variar en función del organismo, tejido o incluso dentro de una misma célula; en cualquier caso, depende de las condiciones nutricionales y fisiopatológicas. Por ejemplo:
ejemplo de glicerofosfolípido: una fosfatidiletanolamina
Dada la variabilidad presente en los ácidos grasos de los glicerofosfolípidos, al igual que ocurre con otros lípidos, un compuesto determinado, p. ej. la fosfatidilcolina, es en realidad un conjunto de distintas especies moleculares que se diferencian en los ácidos grasos que contienen. La distribución de estas especies moleculares depende también del tipo de organismo, tejido o célula.
El carácter anfipático de los glicerofosfolípidos se debe a la hidrofobia de las cadenas de los ácidos grasos, por un lado, y, por otro, a la presencia de la cabeza polar que corresponde al grupo fosforilo y a los grupos unidos a éste, que son polares y en muchos casos (colina, etanolamina, serina y otros) están cargados a pH=7.
A pH fisiológico, la fosfatidilcolina y la fosfatidiletanolamina están como iones dobles (zwitteriones) sin carga neta, mientras que la fosfatidilserina tiene carga neta -1; el fosfatidilglicerol y el fosfatidilinositol también tienen carga -1 a pH neutro (estos últimos tres tipos son, pues, fosfolípidos ácidos).
Un tipo especial de glicerofosfolípidos son los plasmalógenos.